Por ahora, no se han revelado ni el porcentaje exacto ni el costo de la transacción.
Casi seis años después de que IAG intentara comprar Air Europa por 1.000 millones de euros en una operación que no se concretó, la aerolínea vuelve a ser noticia ahora que Turkish Airlines (THY) ha anunciado su intención de hacer una oferta vinculante para adquirir una participación minoritaria en la compañía. Hasta ahora, no se ha revelado el porcentaje exacto ni el costo de la transacción. La única información que se ha hecho pública es que THY comunicó a la bolsa de Estambul su intención de realizar una oferta vinculante por una participación minoritaria de la aerolínea española, tras llevar a cabo estudios de viabilidad que consideran alineados con los objetivos de creación de valor a largo plazo en su estrategia para 2033. Air Europa, que está en un 80% en manos de Globalia, de la familia Hidalgo, y en un 20% de IAG, ha despertado el interés de importantes grupos europeos como Lufthansa y Air France-KLM, que recientemente abandonaron las negociaciones, dejando espacio para que la aerolínea turca, cuyo principal accionista es el Estado con un 49,4753% de las acciones, avance. La potencial venta de Air Europa ha sido objeto de discusión durante seis años, habiéndose valorado inicialmente la operación en 1.000 millones de euros por IAG. Con la llegada de la Covid, los precios en el sector cayeron drásticamente y la demanda no logró recuperarse. «El pacto fue cancelado, recibimos la compensación adecuada -75 millones de euros como penalización-, y todos los compromisos quedaron sin efecto,» recordó Juan José Hidalgo, el presidente ejecutivo de Air Europa, en una entrevista con Efe en ese momento. Más tarde, las conversaciones se reiniciaron y la oferta final de IAG por la aerolínea se disminuyó a 500 millones. Tras mucha deliberación y la conclusión de la transacción entre las partes, Bruselas estableció restricciones tan severas a la operación que, en última instancia, el grupo británico -que incluye a British Airways, Iberia, Vueling, Aer Lingus y Level- decidió no seguir adelante. Después de este fracaso, las conversaciones con las aerolíneas europeas continuaron, siendo una de ellas el grupo Lufthansa, que anunció hace unos días su retiro de las negociaciones para adquirir una participación en la compañía, mientras que Air France-KLM también se había retirado una semana antes. En febrero, se reportó que Lufthansa tenía intenciones de comprar hasta el 25 % de las acciones de la aerolínea española, por aproximadamente 240 millones. Con la salida de Lufthansa y Air France-KLM de la disputa, Turkish Airlines fue el único competidor que continuó con las negociaciones, informando el 20 de junio que estaban en conversaciones no vinculantes para considerar una posible inversión en Air Europa. El año pasado, Air Europa obtuvo una ganancia de 116 millones antes de impuestos, lo que representó un incremento del 7% respecto al año anterior, y esta semana planea pagar los 39 millones que le quedan del préstamo de 141 millones otorgado por el ICO en 2020 debido a la pandemia. Debido a la Covid, la empresa ha obtenido un préstamo de 475 millones de euros de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) para mitigar los impactos de la disminución de la actividad, el cual debe ser reembolsado en noviembre de 2026.
Casi seis años después de que IAG intentara comprar Air Europa por 1.000 millones de euros en una operación que no se concretó, la aerolínea vuelve a ser noticia ahora que Turkish Airlines (THY) ha anunciado su intención de hacer una oferta vinculante para adquirir una participación minoritaria en la compañía. Hasta ahora, no se ha revelado el porcentaje exacto ni el costo de la transacción. La única información que se ha hecho pública es que THY comunicó a la bolsa de Estambul su intención de realizar una oferta vinculante por una participación minoritaria de la aerolínea española, tras llevar a cabo estudios de viabilidad que consideran alineados con los objetivos de creación de valor a largo plazo en su estrategia para 2033. Air Europa, que está en un 80% en manos de Globalia, de la familia Hidalgo, y en un 20% de IAG, ha despertado el interés de importantes grupos europeos como Lufthansa y Air France-KLM, que recientemente abandonaron las negociaciones, dejando espacio para que la aerolínea turca, cuyo principal accionista es el Estado con un 49,4753% de las acciones, avance. La potencial venta de Air Europa ha sido objeto de discusión durante seis años, habiéndose valorado inicialmente la operación en 1.000 millones de euros por IAG. Con la llegada de la Covid, los precios en el sector cayeron drásticamente y la demanda no logró recuperarse. «El pacto fue cancelado, recibimos la compensación adecuada -75 millones de euros como penalización-, y todos los compromisos quedaron sin efecto,» recordó Juan José Hidalgo, el presidente ejecutivo de Air Europa, en una entrevista con Efe en ese momento. Más tarde, las conversaciones se reiniciaron y la oferta final de IAG por la aerolínea se disminuyó a 500 millones. Tras mucha deliberación y la conclusión de la transacción entre las partes, Bruselas estableció restricciones tan severas a la operación que, en última instancia, el grupo británico -que incluye a British Airways, Iberia, Vueling, Aer Lingus y Level- decidió no seguir adelante. Después de este fracaso, las conversaciones con las aerolíneas europeas continuaron, siendo una de ellas el grupo Lufthansa, que anunció hace unos días su retiro de las negociaciones para adquirir una participación en la compañía, mientras que Air France-KLM también se había retirado una semana antes. En febrero, se reportó que Lufthansa tenía intenciones de comprar hasta el 25 % de las acciones de la aerolínea española, por aproximadamente 240 millones. Con la salida de Lufthansa y Air France-KLM de la disputa, Turkish Airlines fue el único competidor que continuó con las negociaciones, informando el 20 de junio que estaban en conversaciones no vinculantes para considerar una posible inversión en Air Europa. El año pasado, Air Europa obtuvo una ganancia de 116 millones antes de impuestos, lo que representó un incremento del 7% respecto al año anterior, y esta semana planea pagar los 39 millones que le quedan del préstamo de 141 millones otorgado por el ICO en 2020 debido a la pandemia. Debido a la Covid, la empresa ha obtenido un préstamo de 475 millones de euros de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) para mitigar los impactos de la disminución de la actividad, el cual debe ser reembolsado en noviembre de 2026.