Intentaban contrarrestar la prohibición del Rey sobre los sacrificios, pero no lograron llegar a tiempo.
Los ganaderos en Marruecos están atravesando una crisis debido a la demora en las ayudas gubernamentales y anticipan un «verano complicado» en medio de problemas como la falta de agua y el incremento en los precios de los alimentos. Según un ganadero de las áreas de Fez y Loukkos que conversó con Hespress, el principal problema es la deuda acumulada por la preparación del último Eid al-Adha, que se celebró sin sacrificios debido a una directiva del Rey para proteger el ganado nacional. Ibrahim Al-Sahrawi, líder del grupo de criadores de ganado Loukkos y miembro de la Asociación Nacional de Criadores de Ovejas y Cabras (ANOC), expresó su preocupación por el deterioro de la situación durante este verano. Están atravesando una etapa muy complicada a causa de las repetidas sequías, indicando que «lo que empeora la situación es la demora en la entrega de la ayuda que se nos ha prometido». Muchos hemos tenido que depender de préstamos, ya sea de familiares o de proveedores de alimentos, lo que representa una pesada carga para nuestra calidad de vida. «Cada día viajamos grandes distancias en busca de agua limpia, tomando precauciones para no utilizar agua potable, ya que esto afecta la salud del ganado y también porque hay escasez de agua». «La reciente celebración de Eid al-Adha, que no implicó el sacrificio de ovejas, tuvo un impacto grave en nuestros ingresos». Sus fuentes de ingresos cayeron a un nivel sin igual, a pesar de que el ganadero se comprometió a sostener un rebaño nacional en aumento, realizando sacrificios para asegurar la continuidad de este sector indispensable que, a su juicio, es fundamental para el sustento de miles de familias. «No tenemos información oficial acerca de a dónde va el apoyo del gobierno.» Al mismo tiempo, hemos acumulado deudas vinculadas a la adquisición de forraje y otras asociadas a medicamentos.
Los ganaderos en Marruecos están atravesando una crisis debido a la demora en la llegada de las ayudas gubernamentales, lo que les presenta un «verano complicado» ante problemas como la falta de agua y los elevados costos de los alimentos. Según un ganadero de las áreas de Fez y Loukkos que conversó con Hespress, el principal problema radica en las deudas contraídas para la preparación del último Eid al-Adha, que se celebró sin sacrificios (por orden del Rey para resguardar el ganado nacional). Ibrahim Al-Sahrawi, líder del grupo de criadores de ganado de Loukkos, perteneciente a la Asociación Nacional de Criadores de Ovejas y Cabras (ANOC), expresó su preocupación por el deterioro de la situación durante este verano. Están atravesando una etapa muy complicada a causa de las repetidas sequías, indicando que «lo que empeora el sufrimiento es la demora en la entrega de la ayuda que se nos ha asignado». «Muchos hemos tenido que acudir a préstamos, ya sea de familiares o de proveedores, lo que representa una pesada carga para nuestra calidad de vida.» «Cada día recorremos extensas distancias en busca de agua limpia, siendo cautelosos con el uso de agua potable debido a su efecto perjudicial en la salud del ganado y la limitada disponibilidad de agua.» «El reciente Eid al-Adha, que no tuvo el sacrificio de ovejas, tuvo un impacto negativo significativo en nuestros ingresos.» Sus fuentes de ingresos se han visto gravemente afectadas, aunque el ganadero ha seguido dedicado a preservar un rebaño nacional en expansión, haciendo concesiones para asegurar la continuidad de este sector crucial que, según sus palabras, es fundamental para el sustento de miles de familias. «No contamos con información oficial acerca de la utilización del apoyo del gobierno.» Por otro lado, hemos contraído deudas asociadas a la adquisición de forraje y también a la compra de medicamentos.