Tensión. Nerviosismo. Dispositivos electrónicos. Horarios nocturnos. O demasiado pronto. Sonidos. Contaminación por luces. Temperatura elevada. Exceso de peso. Descendencia. El no poder conseguirlos. Escasez de fondos. Sobre el hogar. Estilo de vida sedentario. Alteraciones hormonales. Es sencillo hallar razones para tener un sueño deficiente en una sociedad que ha ignorado los ritmos naturales del descanso.
Mientras que Francia implementa una estrategia innovadora para tratar el problema como si fuera una epidemia, España lidera el consumo global de benzodiacepinas y casi la mitad de su población tiene problemas para dormir.
Tensión. Preocupación. Dispositivos electrónicos. Horarios nocturnos. O demasiado pronto. Sonidos. Polución por luz. Temperatura elevada. Exceso de peso. Descendencia. Al no poder disponer de ellos. Escasez de fondos. Sobre la vivienda. Estilo de vida sedentario. Desequilibrios hormonales. En una sociedad que ha ignorado los ritmos naturales del sueño, es sencillo encontrar razones para tener un sueño de mala calidad.
