Es la principal contribuyente al fondo común, aportando cerca de 8.000 millones, en comparación con los 2.266 millones que contribuye Cataluña, que es la segunda mayor aportadora.
No se han realizado modificaciones en las contribuciones al sistema de financiación autonómica (SFA), y se ha confirmado que solo tres comunidades autónomas -Madrid, Cataluña y Baleares, que tienen los ingresos per cápita más altos- son las únicas que contribuyen netamente. Madrid sigue siendo la principal fuente de apoyo del sistema, aportando casi cuatro veces más que Cataluña. El más reciente estudio de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), dirigido por Ángel de la Fuente, confirma que en la liquidación de la financiación de 2023, según los datos oficiales del Ministerio de Hacienda, regiones como Murcia, la Comunidad Valenciana, Andalucía y Castilla-La Mancha se encuentran entre las menos beneficiadas. Su financiación efectiva por habitante ajustada varía entre 43,0 y 94,7, lo que está por debajo de la media establecida en 100. Fedea señala que, según los datos analizados, el fondo provisional debería recibir una contribución extraordinaria de 3.582 millones de euros por parte del Estado, además del sistema de financiación. Esta cantidad se distribuiría entre Andalucía (1.528 millones), Valencia (1.260 millones), Murcia (412 millones) y Castilla La Mancha (383 millones), según informó la consejería. El estudio destaca especialmente las variaciones observadas en las posiciones relativas de las diferentes comunidades autónomas en términos de financiación efectiva por habitante ajustado entre 20143 y 2023, las cuales han sido significativas en algunos casos. El progreso más significativo se ha observado en Cantabria, que aumenta 3,1 puntos en comparación con el año pasado. Por otro lado, Aragón, La Rioja y Baleares han enfrentado las mayores caídas, perdiendo entre 2,4 y 4,7 puntos. En contraposición, Murcia, la Comunidad Valenciana, Andalucía y Castilla-La Mancha se encuentran en las últimas posiciones del ranking, con índices de financiación efectiva por habitante ajustado que oscilan entre 92 y 94. En 2023, Andalucía obtuvo 3.208 euros por habitante ajustado, lo que representa 182 euros menos que la media y 21 euros menos que Cantabria, que es la comunidad que recibió la mayor cantidad de recursos por habitante ajustado (294 euros). Además, recibió 22,022 euros por habitante menos que La Rioja, 23 euros menos que Extremadura, 24 euros menos que Castilla y León y 214 euros menos por habitante ajustado que Asturias. Sin embargo, también se observan notables coincidencias entre los contribuyentes netos del sistema. De acuerdo a las conclusiones del informe, el sistema proporciona a las comunidades de bajos ingresos recursos adicionales, superando sus ingresos fiscales, por un total cercano a 83 millones de euros. Algunos fondos provienen en parte del Estado, que contribuye con más de 28 millones de euros, y en parte de las comunidades autónomas con mayores ingresos por persona, es decir, Madrid, Cataluña y Baleares, que suman otros 234 millones, aunque existe una gran diferencia entre estas tres.
No se han realizado modificaciones en las contribuciones al sistema de financiación autonómica (SFA), y se ha confirmado que solo tres comunidades autónomas -Madrid, Cataluña y Baleares, que tienen los ingresos per cápita más altos- son las únicas que contribuyen netamente. Madrid sigue siendo la principal fuente de apoyo del sistema, aportando casi cuatro veces más que Cataluña. El más reciente estudio de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), dirigido por Ángel de la Fuente, confirma que en la liquidación de la financiación de 2023, según los datos oficiales del Ministerio de Hacienda, regiones como Murcia, la Comunidad Valenciana, Andalucía y Castilla-La Mancha se encuentran entre las menos beneficiadas. Su financiación efectiva por habitante ajustada varía entre 43,0 y 94,7, lo que está por debajo de la media establecida en 100. Fedea señala que, según los datos analizados, el fondo provisional debería recibir una contribución extraordinaria de 3.582 millones de euros por parte del Estado, además del sistema de financiación. Esta cantidad se distribuiría entre Andalucía (1.528 millones), Valencia (1.260 millones), Murcia (412 millones) y Castilla La Mancha (383 millones), según informó la consejería. El estudio destaca especialmente las variaciones observadas en las posiciones relativas de las diferentes comunidades autónomas en términos de financiación efectiva por habitante ajustado entre 20143 y 2023, las cuales han sido significativas en algunos casos. El progreso más significativo se ha observado en Cantabria, que aumenta 3,1 puntos en comparación con el año pasado. Por otro lado, Aragón, La Rioja y Baleares han enfrentado las mayores caídas, perdiendo entre 2,4 y 4,7 puntos. En contraposición, Murcia, la Comunidad Valenciana, Andalucía y Castilla-La Mancha se encuentran en las últimas posiciones del ranking, con índices de financiación efectiva por habitante ajustado que oscilan entre 92 y 94. En 2023, Andalucía obtuvo 3.208 euros por habitante ajustado, lo que representa 182 euros menos que la media y 21 euros menos que Cantabria, que es la comunidad que recibió la mayor cantidad de recursos por habitante ajustado (294 euros). Además, recibió 22,022 euros por habitante menos que La Rioja, 23 euros menos que Extremadura, 24 euros menos que Castilla y León y 214 euros menos por habitante ajustado que Asturias. Sin embargo, también se observan notables coincidencias entre los contribuyentes netos del sistema. De acuerdo a las conclusiones del informe, el sistema proporciona a las comunidades de bajos ingresos recursos adicionales, superando sus ingresos fiscales, por un total cercano a 83 millones de euros. Algunos fondos provienen en parte del Estado, que contribuye con más de 28 millones de euros, y en parte de las comunidades autónomas con mayores ingresos por persona, es decir, Madrid, Cataluña y Baleares, que suman otros 234 millones, aunque existe una gran diferencia entre estas tres.