La aerolínea de bajo costo señala que ha reducido 800,000 plazas para este verano en aeropuertos regionales debido a un sistema de precios que no ha funcionado.
Aena, el administrador de aeropuertos en España, ha declarado que en 2026 cobrará a las aerolíneas una tarifa máxima de 11,03 euros por pasajero, lo que representa un aumento de 68 céntimos con respecto a la tarifa actual. Esta elección fue realizada el miércoles tras la aprobación por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) a mediados de julio sobre la revisión de tarifas presentada por Aena, que prevé un incremento de hasta el 6,5% en las tasas aeroportuarias para 2026. Sin embargo, este aumento fue rechazado el día de ayer por la Asociación de Líneas Aéreas (ALA) y este jueves Ryanair lo calificó de «excesivo». La aerolínea de bajo costo ha afirmado que este es el «nivel más alto en diez años», aunque esto coincide con los récords de ganancias y número de pasajeros reportados por Aena. Frente a esta situación, ha advertido sobre la posibilidad de reducir rutas y considera que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) debería «rechazar de inmediato» este aumento «injustificado y perjudicial». «Si Aena continúa aumentando sus tarifas, que ya son poco competitivas, Ryanair se verá obligada a disminuir drásticamente el número de asientos y rutas que opera hacia la España regional», ha destacado la aerolínea de bajo costo en un comunicado. Además, ha señalado que los efectos de dichos recortes impactarán «más severamente» en los aeropuertos regionales, que ya están «casi al 70% vacíos debido a una estructura de tarifas ineficaz». En este contexto, ha criticado que en los últimos cinco años el gestor aeroportuario ha intentado aumentar las tarifas en cada ocasión, actuando en su «propio beneficio», a pesar de una resolución gubernamental que congeló estas tarifas. Sin embargo, el Gobierno ha optado por no prolongar esta legislación, lo que Ryanair considera una «inacción» frente al «deterioro de la conectividad y el turismo regional». «Simplemente prolongar esta ley habría protegido a los ciudadanos y turistas en España de los constantes intentos de Aena de aprovechar su monopolio.» Sin esta extensión, Ryanair se verá obligada a ajustar de inmediato su capacidad prevista para el invierno 2025/26 en España, ya que muchas de sus rutas se vuelven económicamente inviables. El director ejecutivo de Ryanair, Eddie Wilson, ha afirmado que la decisión de Aena demuestra que el gestor aeroportuario solo busca «obtener beneficios monopólicos» y que las tarifas «excesivas» están «paralizando el tráfico, reduciendo la conectividad, limitando el turismo y causando la pérdida de miles de empleos en la España regional». También destacó que Ryanair ya había reducido 800.000 asientos para este verano en aeropuertos regionales debido a la «fallida» estructura de tarifas en las instalaciones de Aena.
Aena, el administrador de aeropuertos en España, ha declarado que en 2026 cobrará a las aerolíneas una tarifa máxima de 11,03 euros por pasajero, lo que representa un aumento de 68 céntimos con respecto a la tarifa actual. Esta elección fue realizada el miércoles tras la aprobación por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) a mediados de julio sobre la revisión de tarifas presentada por Aena, que prevé un incremento de hasta el 6,5% en las tasas aeroportuarias para 2026. Sin embargo, este aumento fue rechazado el día de ayer por la Asociación de Líneas Aéreas (ALA) y este jueves Ryanair lo calificó de «excesivo». La aerolínea de bajo costo ha afirmado que este es el «nivel más alto en diez años», aunque esto coincide con los récords de ganancias y número de pasajeros reportados por Aena. Frente a esta situación, ha advertido sobre la posibilidad de reducir rutas y considera que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) debería «rechazar de inmediato» este aumento «injustificado y perjudicial». «Si Aena continúa aumentando sus tarifas, que ya son poco competitivas, Ryanair se verá obligada a disminuir drásticamente el número de asientos y rutas que opera hacia la España regional», ha destacado la aerolínea de bajo costo en un comunicado. Además, ha señalado que los efectos de dichos recortes impactarán «más severamente» en los aeropuertos regionales, que ya están «casi al 70% vacíos debido a una estructura de tarifas ineficaz». En este contexto, ha criticado que en los últimos cinco años el gestor aeroportuario ha intentado aumentar las tarifas en cada ocasión, actuando en su «propio beneficio», a pesar de una resolución gubernamental que congeló estas tarifas. Sin embargo, el Gobierno ha optado por no prolongar esta legislación, lo que Ryanair considera una «inacción» frente al «deterioro de la conectividad y el turismo regional». «Simplemente prolongar esta ley habría protegido a los ciudadanos y turistas en España de los constantes intentos de Aena de aprovechar su monopolio.» Sin esta extensión, Ryanair se verá obligada a ajustar de inmediato su capacidad prevista para el invierno 2025/26 en España, ya que muchas de sus rutas se vuelven económicamente inviables. El director ejecutivo de Ryanair, Eddie Wilson, ha afirmado que la decisión de Aena demuestra que el gestor aeroportuario solo busca «obtener beneficios monopólicos» y que las tarifas «excesivas» están «paralizando el tráfico, reduciendo la conectividad, limitando el turismo y causando la pérdida de miles de empleos en la España regional». También destacó que Ryanair ya había reducido 800.000 asientos para este verano en aeropuertos regionales debido a la «fallida» estructura de tarifas en las instalaciones de Aena.